Un periódico católico alemán destaca en su portada el alegato de Pedro Almodóvar a favor de la eutanasia

Advierte a los creyentes de todas las religiones que "respeten esta decisión individual y no interfieran"

El director Pedro Almódovar posa con su León de Oro en el Festival de Venecia, a 7 de septiembre de 2024, en Venecia (Italia). ‘La habitación de al lado’, la primera película de Pedro Almodóvar rodada íntegramente en inglés/ Stefano Spaziani / Europa Press.
Un periódico católico alemán destaca en su portada el alegato de Pedro Almodóvar a favor de la eutanasia.
  1. La advertencia de Almodóvar a los creyentes 
  2. Libertad de morir 
  3. Apasionado alegato por la eutanasia activa
     
El director Pedro Almódovar posa con su León de Oro en el Festival de Venecia, a 7 de septiembre de 2024, en Venecia (Italia). ‘La habitación de al lado’, la primera película de Pedro Almodóvar rodada íntegramente en inglés/ Stefano Spaziani / Europa Press.
El director Pedro Almódovar posa con su León de Oro en el Festival de Venecia, a 7 de septiembre de 2024, en Venecia (Italia). ‘La habitación de al lado’, la primera película de Pedro Almodóvar rodada íntegramente en inglés/ Stefano Spaziani / Europa Press.

Las opiniones de Pedro Almodóvar a favor de la eutanasia ha sido noticia para el periódico católico alemán, DieTagespost por su contundencia y además, por la advertencia que realiza el director de cine sobre los creyentes. 

Pedro Almodóvar recibió el León de Oro por su primera película en inglés, The Room Next Door en el Festival Internacional de Cine de Venecia de este año. 

La advertencia de Almodóvar a los creyentes 

Durante la ceremonia, el director afirmó: “La película trata sobre una mujer que muere en un mundo agonizante y una persona que decide pasar sus últimos días con ella. Acompañar a un enfermo terminal, estar ahí para él y en ocasiones consolarlo con solo una palabra es una de las grandes cualidades humanas. La película no solo habla de la solidaridad incondicional de Ingrid, sino también de la decisión de Martha de “acabar con su vida” cuando esta sólo consiste en un dolor insoportable”. 

El cineasta reconoció que “este derecho”, el derecho a la eutanasia, contradice “las creencias religiosas que ven a Dios como la única fuente de la vida y por tanto la única autoridad para el fin de la vida”.

Pero aún así, hizo un llamamiento a "los creyentes de todas las religiones para que respeten esta decisión individual y no interfieran". Su razonamiento: “El hombre debería ser libre de vivir y morir cuando la vida se haya vuelto insoportable”.

Se da la circunstancia de que los creyentes, además de pensar en Dios como única fuente de vida, reivindican su derecho a recibir cuidados paliativos hasta el final de su vida, unos cuidados que la eutanasia podría estar impidiendo en muchos casos. 

Libertad de morir 

Por otra parte, Almodóvar defendió sus puntos de vista: "Toda mi vida y mi trabajo he luchado por la libertad de los personajes de mis películas: por la libertad de vivir, y ahora, a medida que me hago mayor, también por la libertad de morir, si esa vida sólo trae dolor.” 

El anuncio oficial en la página web del festival describe la película de la siguiente manera: “Ingrid y Martha eran amigas cercanas en su juventud cuando trabajaban juntas para la misma revista. Más tarde, Ingrid siguió una carrera como escritora, mientras que Martha se convirtió en reportera de guerra. La vida los separó y perdieron el contacto. Ahora, después de muchos años, se reencuentran en una situación extrema pero extrañamente tierna”.

Apasionado alegato por la eutanasia activa

Esta situación “extrema” consiste en la decisión de la periodista Martha (Tilda Swinton), de 60 años, que quiere acabar con su vida debido a un cáncer incurable. Le pide a su amiga Ingrid (Julianne Moore) que la acompañe en sus últimos días.

 

A continuación, Almodóvar hizo un apasionado llamamiento a favor de la eutanasia activa, describe el periódico católico alemán: “Despedirse de este mundo con dignidad y paz es, en mi opinión, un derecho fundamental de todo ser humano. No es una cuestión política, sino profundamente humana, que debe ser tratada con compasión, aunque es tarea de los gobiernos crear las leyes necesarias para que esto sea posible”. 

 

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