En colegios católicos, algún alumno ha pedido dormir con alumnas en excursiones por sentirse “chica”
Escuelas Católicas envía a sus centros un documento para resolver, sin discriminación pero con coherencia, los casos de transexualidad
El presidente de la Conferencia Episcopal, el cardenal Ricardo Blázquez, alertó ayer, como pocas veces, sobre los peligros de la ideología de género, en su discurso inaugural de 110ª Asamblea Plenaria de obispos españoles. Un tema que preocupa a los representantes de los colegios católicos españoles, agrupados en la Federación Española de Religiosos de Enseñanza (Escuelas Católicas).
Blázquez dedicó el cincuenta por ciento de su discurso a advertir sobre las amenazas de la ideología de género, que “a veces pretende imponerse como pensamiento único, hasta en la educación de los niños”, dijo.
Ante este desafío, la Subcomisión Episcopal para la Familia y defensa de la Vida de la Conferencia Episcopal Española, trabajará durante esta semana en un estudio sobre ideología de género y su traslación a proyectos legislativos. Dicho estudio será presentado al finalizar la Asamblea Plenaria.
Antropología anticristiana
Un tema que no es baladí para la Federación de Escuelas Católicas. El Secretario General, José María Álvira, declara a Religión Confidencial que la ideología de género y las leyes aprobadas en las distintas comunidades autónomas, así como la que se está elaborando a nivel estatal, afecta directamente a la educación.
“Estas leyes proponen una antropología que en muchos casos no concuerdan con la cristiana, y en nuestros colegios, debemos ser fieles a nuestra antropología”, afirma Álvira a RC.
Con el fin de ser coherentes con su ideario cristiano pero, a la vez, respetar las leyes impuestas sin que choquen con otros derechos fundamentales (como la libertad de enseñanza, religión y expresión), un grupo de expertos de Escuelas Católicas (abogados, psicólogos, teólogos y médicos, entre otros), han trabajado en un extenso documento que se ha enviado a los colegios integrados en esta Federación, para tratar casos de alumnos que se consideran transexuales.
“Se trata sobre todo de respetar al máximo al niño, cumplir con las leyes, pero también, actuar con coherencia a nuestra ideología cristiana en donde prime el sentido educativo y el sentido común”, explica Álvira.
Casos concretos
Así, algún colegio católico (pocos por ahora) han tenido que resolver algún caso de alumnos que se sienten del sexo diferente al biológico. Los servicios jurídicos de Escuelas Católicas están al servicio de estos centros para resolver estos casos desde el punto de vista legal.
“Hemos tenido algún alumno que se sentía chica, y que en una excursión de un par de días, pedía dormir con las alumnas. Para resolver esta situación, además de escuchar al adolecente, la dirección del centro dio a conocer a toda la comunidad educativa, de esta situación: profesores, padres de las alumnas, y las mismas alumnas. Al final, creo que el alumno compartió habitación con las chicas, pues él se sentía como tal y tanto padres como alumnas también lo habían consentido”, explica José María Álvira.
Acompañamiento personal
El documento elaborado por Escuelas Católicas recalca que, ante estos casos de alumnos que se sienten del sexo contrario al biológico, los centros deben resolver combinando, en primer lugar, el respeto al alumno, la no discriminación, pero sin obviar el ideario cristiano del colegio, ni el derecho de los padres a una educación conforme a sus planteamientos.
“Creemos que ante estos casos, en nuestros centros prima el acompañamiento personal al alumno, atendiendo su desarrollo integral y armonioso de la persona”, manifiesta el Secretario General de Escuelas Católicas.
