Vandalismo en las clínicas provida de USA: “Nos están atacando. El FBI está al tanto”

“Nos han atacado. La policía es consciente. El FBI está al tanto y está muy atento”. Son las declaraciones de Roderick P. Murphy, director de la clínica Problem Pregnancy (Problemas en el embarazo), un centro que ayuda a las madres en la cidad de Worcester en el Estado de Massachusetts. 

Tanto este centro como Clearway Clinic de la misma ciudad, fueron destrozados en la madrugada del 7 de julio. El edificio de Problem Pregnancy fue desfigurado con pintura en aerosol azul y amarilla en el techo, las ventanas y el área de estacionamiento y con una pintada donde se leía “La venganza de Jane”. Se da la circunstancia de que este edificio se encuentra al otro lado de la calle del Centro de Salud Central de Massachusetts de Planned Parenthood, donde se realizan abortos, informa The Catholic Free Press.  

"La venganza de Jane" 

Clearway Clinic también fue objeto de actos de vandalismo con tres ventanas rotas, dos puertas delanteras destrozadas y, de la misma manera, la firma "La venganza de Jane" fue pintada con aerosol en la pasarela exterior del edificio. 

Ambas clínicas brindan asistencia a mujeres con embarazos no planificados cuyos servicios son gratuitos Incluyen pruebas de embarazo, ecografías obstétricas, apoyo a mujeres quienes han tenido un aborto y conectan a las mujeres con recursos comunitarios. Además, Clearway Clinic también proporciona pruebas para infecciones de transmisión sexual. 

Iglesias objeto de ataques 

Tras la filtración de la opinión en Dobbs v. Jackson Women's Health a principios de mayo y el fallo de la Corte Suprema del 24 de junio que anuló Roe v. Wade, se ha producido vandalismo en los centros de embarazo en numerosas ocasiones en todo el país. 

Los centros de embarazo pro-vida han sido atacados desde principios de mayo, con las palabras “La venganza de Jane”. En los últimos meses, muchas iglesias, especialmente las católicas, también han sido objeto de ataques.

Más de 10.000 familias atendidas 

Kelly Wilcox, directora ejecutiva de Clearway Clinic, ha expresado su tristeza por estos hechos además de indicar que se "malinterpreta" los servicios de la clínica que ha atendido a más de 10.000 familias.

"Todas las mujeres son bienvenidas en la clínica independientemente de lo que finalmente decidan hacer... Somos una clínica médica con licencia estatal con un equipo de médicos certificados por la junta y enfermeras que brinda atención médica gratuita a mujeres en el centro y oeste de Massachusetts. Nuestro centro está comprometido con el 100 por ciento de transparencia en todas las prácticas de marketing e interacciones con los pacientes. No practicamos abortos y tenemos cuidado de divulgar este hecho antes de programar cualquier cita”, señaló Wilcox. 

Este centro ha hecho un llamamiento a los funcionarios de Massachusetts para que “condenen este ataque”. 

“Estamos comprometidos a continuar con nuestra misión de servir a las mujeres en nuestra comunidad”, dijo Wilcox. 

Quién está detrás de estos delitos 

Debido a la frecuencia de estos ataques en todo el país, las autoridades federales han tomado especial interés en saber quién está detrás de estos delitos. 

El pasado 30 de mayo, un grupo que se hacía llamar "La venganza de Jane" lanzó un llamamiento en el que se pedía que se saliera después del anochecer para expresar su ira por la decisión de la Corte Suprema, según información de varios medios católicose estadounidenses.

Algunos medios han descrito al grupo "Jane's Revenge" (La venganza de Jane) como un grupo anarquista y extremista a favor del derecho al aborto. El grupo ha asumido la responsabilidad de casos de vandalismo, bombas incendiarias e incendios provocados contra centros de embarazo en crisis así como a una oficina de campaña del representante Tim Walberg, un republicano de Michigan.

Anuncian actos vandálicos más drásticos 

Una carta fechada el 14 de junio, enviada al sitio de blogs anónimos noblogs.org por un grupo que decía ser Jane's Revenge, exclamaba lo “divertido” que es atacar y amenazaba con “tomar medidas cada vez más drásticas contra las infraestructuras opresivas. Tengan la seguridad de que lo haremos, y es posible que esas medidas no vengan en forma de algo tan fácil de limpiar como el graffiti”.  

La carta en el sitio de blogs decía: “Todos los que tengan ganas de pintar, quemar, cortar, atacar ahora es el momento”.