Iglesia pobre, para los pobres... corrientes
02 de marzo de 2017 (02:00 h.)
Lo noté contento...
¿Puedes hablar?, me dijo. Sí, voy por la calle.
¿Desde dónde me llamas? De mi móvil a tu móvil. Ah, vale, le dije.
Tengo todos los documentos, sólo me falta uno. Se lo encargué a unos familiares...
Y se me ocurrió: Voy a llamar por teléfono, para pedirlo; no me harán ni caso, pero bueno, lo intento...
Vídeo del día
Detenida en Madrid una kamikaze borracha y
con un kilo de cocaína en el maletero
Y mi sorpresa, me cogió una monjita encantadora y me pasó con un señor, el encargado, muy amable.
¿Qué desea? Deme los datos... Se los di.
Pero es que yo vivo fuera... Deme su domicilio y, no hay problema, le mandamos por correo el Certificado...
¿Cuánto tengo que pagarles?, pregunté. No, no, la voluntad, me respondió.
Bueno, cuando vaya en Semana Santa, mi donativo para el Cristo de la Catedral.