¿Qué santos se celebran hoy, lunes 22 de enero de 2024? Consulta aquí el santoral
Infórmate sobre los santos que se celebran hoy. Consulta el santoral para que no se te escape ninguna felicitación
- San Vicente de Zaragoza
- San Babilio
- San Atón de Constantinopla
- Santa Adelaida de Vilich
- San Adalberto de Praga
- Beato Juan de Brébeuf
- Beato Pedro de San José Betancur
Hoy, lunes 22 de enero de 2024, el santoral católico celebra los siguientes santos:
San Vicente de Zaragoza
San Vicente es uno de los tres grandes diáconos que dieron su vida por Cristo. Junto con Lorenzo y Esteban Corona, Laurel y Victoria forma el más insigne triunvirato. Este mártir celebrado por toda la Cristiandad, encontró su panegirista en San Agustín, San León Magno y San Ambrosio.
Vicente descendía de una familia consular de Huesca, y su madre, según algunos, era hermana del mártir San Lorenzo. Estudió la carrera eclesiástica en Zaragoza, al lado del obispo Valero, quien por su falta de facilidad de expresión, lo nombró primer diacono para sustituirle en la sagrada cátedra.
Paralelamente, el emperador Dioclesiano había decretado una de las más crueles persecuciones contra la Iglesia, y que fue aplicado por Daciano en España. Las cárceles, que estaban reservadas antes para los delincuentes comunes, pronto se llenaron de obispos, presbíteros y diáconos. Al pasar Daciano por Barcelona, sacrifica a San Cucufate y a la niña Santa Eulalia. Cuando llega a Zaragoza, manda detener al obispo y a su diácono, Valero y Vicente, y trasladarlos a Valencia.
Allí se celebró el primer interrogatorio. Vicente responde por los dos, intrépido y con palabra ardiente. Daciano se irrita, manda al destierro a Valero, y Vicente es sometido a la tortura del potro.
Su cuerpo es desgarrado con uñas metálicas. Mientras lo torturaban, el juez intimaba al mártir a la abjuración. Vicente rechazaba indignado tales ofrecimientos. Daciano, desconcertado y humillado ante aquella actitud, le ofrece el perdón si le entrega los libros sagrados. Pero la valentía del mártir es inexpugnable. Exasperado de nuevo el Prefecto, mandó aplicarle el supremo tormento, colocarlo sobre un lecho de hierro incandescente. Nada puede quebrantar la fortaleza del mártir que, recordando a su paisano San Lorenzo, sufre el tormento sin quejarse y bromeando entre las llamas.
Lo arrojan entonces a un calabozo siniestro, oscuro y fétido "un lugar más negro que las mismas tinieblas", dice Prudencio. Luego presenta el poeta un coro de ángeles que vienen a consolar al mártir. Iluminan el antro horrible, cubren el suelo de flores, y alegran las tinieblas con sus armonías. Hasta el carcelero, conmovido, se convierte y confiesa a Cristo. Daciano manda curar al mártir para someterlo de nuevo a los tormentos. Los cristianos se aprestan a curarlo. Pero apenas colocado en mullido lecho, queda defraudado el tirano pues el espíritu vencedor de Vicente vuela al paraíso. Era el mes de enero del 304.
Ordena Daciano mutilar el cuerpo y arrojarlo al mar. Pero más piadosas las olas, lo devuelven a tierra para proclamar ante el mundo el triunfo de Vicente el Invicto. Su culto se extendió mucho por toda la cristiandad.
San Babilio
San Babilio fue obispo de Cesarea de Palestina en el siglo III. Fue un defensor de la fe ortodoxa contra las herejías.
Se opuso a la herejía arriana, que negaba la divinidad de Jesucristo. También defendió la primacía del papa.
San Babilio fue martirizado por el emperador Maximino el Tracio. Su martirio es un ejemplo de su amor a la verdad y a la Iglesia.
San Atón de Constantinopla
San Atón de Constantinopla fue un monje y teólogo del siglo VIII. Fundó un monasterio en Constantinopla, donde se dedicó a la oración y la enseñanza.
Fue un maestro de la oración y la vida espiritual. Sus escritos son una fuente importante de la espiritualidad ortodoxa.
San Atón es un ejemplo de la importancia de la oración y la vida espiritual en la vida cristiana.
Santa Adelaida de Vilich
Santa Adelaida de Vilich fue abadesa de un monasterio en Vilich, Alemania, en el siglo IX. Fue una mujer piadosa y dedicada a la caridad.
Se dedicó a la atención de los pobres y enfermos. También fundó un hospital y una escuela.
Santa Adelaida es un ejemplo de la importancia de la caridad y la misericordia en la vida cristiana.
San Adalberto de Praga
San Adalberto de Praga fue obispo de Praga en el siglo X. Fue un misionero que predicó el cristianismo en Polonia y Bohemia.
Fue martirizado por los paganos. Su martirio es un ejemplo de su amor a Cristo y a su pueblo.
San Adalberto es un ejemplo de la importancia de la misión en la vida cristiana.
Beato Juan de Brébeuf
Beato Juan de Brébeuf fue un misionero jesuita en Canadá en el siglo XVII. Fue uno de los mártires de la misión de San José de los Hurones, que fueron asesinados por los iroqueses.
Beato Juan de Brébeuf fue un ejemplo de la fe y la entrega a los demás. Su martirio es un testimonio de su amor a Cristo y a su pueblo.
Beato Pedro de San José Betancur
Beato Pedro de San José Betancur fue un sacerdote franciscano que fundó la Orden de los Hermanos de la Caridad en el siglo XVII. Dedicó su vida a la atención de los pobres y enfermos.
Beato Pedro de San José Betancur fue un ejemplo de la caridad y la misericordia. Su vida es una inspiración para todos los que trabajan por los más necesitados.
