El cuarto poder y el cuarto mundo
En esta ocasión, además de las habituales ponencias de carácter teológico, magisterial, socio-político y experiencial, se ha producido un singular ayuntamiento entre periodistas y misioneros. Tal y como lo calificó uno de los asistentes: ahí, el cuarto poder; aquí, el cuarto mundo.
No es frecuente que, en foros de Iglesia, se favorezca el encuentro entre profesionales de muy distintos medios que, en el día a día, son competencia. Tampoco que la Iglesia se preocupe por escuchar los descargos de conciencia de quienes trabajan con las confesiones privadas y públicas de los demás. En esta ocasión, el crédito intachable de los misioneros hizo posible esta cita.
Se dio la circunstancia, además, de que los periodistas de los diarios nacionales de información general de Madrid, El País, ABC, La Razón y El Mundo, habían sido seleccionados por las respectivas direcciones de los citados medios.
En un clima de amistad, de confidencias, de experiencias compartidas –no en vano el representante de El País, Jorge Marrirrodriga, trabaja en la sección de Internacional y ha sido corresponsal en varios lugares del mundo-, la pregunta de fondo y de forma era: qué interesa a los medios de la vida de los misioneros. Ausentes los reproches, y presente la preocupación común por todo el hombre y por todos los hombres, el diálogo puso en evidencia la necesidad de una frecuencia en el encuentro, el conocimiento mutuo como paso previo a la comprensión del oficio y de sus rutinas.
Y como todo lo periodístico, en sustancia, se expresa en titulares, ahí van algunos de los que se pronunciaron:
- "Los medios de comunicación y la Iglesia son como un matrimonio mal avenido", Laura Daniele, responsable de la información religiosa del diario ABC.
- "La Iglesia no puede dejar pasar la oportunidad de seguir siendo una institución protagonista", José Beltrán, jefe de redacción de sociedad del diario La Razón
- "En la Iglesia hay que aprender de los misioneros, que no tienen miedo a comunicar y siempre están disponibles", Fernando Lázaro, del diario El Mundo.
- "Muchas veces informar de la muerte de los cristianos es incómodo", señaló Jorge Marirrodriga, de El País.
José Francisco Serrano Ocejajfsoc@ono.com
