Una Iglesia no clerical después de la JMJ

El cardenal Rouco Varela es arzobispo de todos, y lo mismo sabe, el sábado, de Cañadas Reales, de niños gitanos cargados de la miseria de los rendimientos decrecientes, que, el lunes, de señoras atentas y solícitas culturalmente católicas. Las parroquias madrileñas son, para el cardenal, estancias de su morada en la tierra. Presentado por el director del diario La Razón; auspiciado, el cardenal y el Foro, por el sacerdote y guardián de la legalidad vigente, el sacerdote don Silverio Nieto, dura ley, pero ley, positiva y canónica, bajo la atenta mirada del párroco, don José Aurelio, un párroco de los siempre, de los de ahora, el cardenal abrió el corazón, su corazón hecho de materia orgánica de la JMJ. Al ritmo de un himno impuesto de letra, "Y después de la JMJ, ¿qué?", cincuenta y cinco minutos de historia y cinco del qué del después. La JMJ está en la escatología de la Iglesia en España.

Mosaico de ideas entresacadas y apuntas en el iphone del disco duro de la conciencia cristiana, perpleja de glosas y apuntes al natural. "Se marchó el Papa más fresco de lo que llegó", y Juan Pablo II sonreía desde el foro de la dimensión eterna. "La apologética diría que la JMJ es una prueba de la divinidad de la I... El carisma Pentecostal de la Jornada estuvo marcado por el signo de la catolicidad, de la apostolicidad", lección del eclesiología en la tradición más granada de los Salmanticenses. Un poco de sociología y de teoría social por eso de la Academia: "El testimonio de fe de la JMJ ha marcado a la sociedad española. A pesar de los indignados, impactó en el mundo juvenil. Fue un descubrimiento de la riqueza total de la iglesia. Experiencia de la vida de la santidad de la Iglesia". Sonreía don Marcelino Oreja, presidente de los hombres de las Ciencias Morales y Políticas.

El cardenal Rouco centrando el balón, era la hora del fútbol. "El gran protagonista de la JMJ fue Cristo". "La policía no creía que los jóvenes eran tan buenos como lo eran". ¿Quién dice ideología, voluntarismo, hermenéutica? El mayo del 68 ha pasado, ¿o acaso sólo existe en la Iglesia? El clericalismo sólo existe en la Iglesia, quienes no aceptan el paso del tiempo es porque no están en el tiempo, están en otro tiempo. "Las objeciones de triunfalismo es típica de los años sesenta"; son las matemáticas del devenir, del progreso del dogma, algo se ha leído por ahí. "Hay que hablar de conversiones, vocaciones clarificadas, amistades, que es lo más importante. Hay una juventud católica en el mundo, la hay en todos los rincones del planeta, sin mucho aparato, sin mucha estructura". Canción de cuna para la nueva juventud de la Iglesia: "Hay una juventud que no rompe con la Iglesia, que no hace distinciones entre Iglesia jerárquica y de base; los jóvenes responden a la misión del Papa y a la llamada del Papa con una respuesta a Cristo sin reducciones, ni dudas sobre quién es Cristo, sobre su Resurrección histórica, sobre la Virginidad de María".

Y, después de la JMJ, eso, sin estructuras, sin aparato, en la unidad y en la comunión de la Iglesia. "Vocación para santificar el mundo no a través del poder sino del ejemplo. Hay que atender a fondo la vida espiritual. Ya no hay parroquia de Madrid que no tenga una exposición con el Santísimo, que no esté frecuentada por jóvenes. Hay que reforzar la comunión que hemos vivido". ¿Una Iglesia no clerical después de la JMJ?

Abstraído de las notas manuscritas, sólo atento al soplo de ese corazón hecho de la pasta de la JMJ, habló el cardenal Rouco en la Parroquia de la Concepción de Goya.

José Francisco Serrano Oceja

jfsoc@ono.com

 
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