A qué tiene miedo Julio Ariza

Al recibir aquella llamada, le respondí: "Por mi parte no hay ninguna guerra". Cosa que era y sigue siendo verdad.

Entonces, Ariza pasó a disculparse por la arremetida contra mí, con palabras parecidas a estas: "Son las cosas de Carlos Dávila (entonces director de La Gaceta). Es un estilo con el que no estoy de acuerdo. Que no me gusta. Te pido disculpas".

Y ahí quedó todo. Hasta ayer.

Porque ahora he merecido la atención preferente de Julio Ariza, con mención expresa de mi nombre, en una "Carta del Editor" publicada el jueves por La Gaceta. Llamada en portada y una plana entera en página 3 contra mi persona. Titular: "Apezarena, Mario Conde y yo". ¿Qué ha ocurrido ahora?

El lunes publicó El Confidencial Digital, del que soy editor, en la sección confidencial El Chivato, un texto que hablaba de Julio Ariza y de Mario Conde.

Aunque puede leerse aquí íntegro, procedo a resumirlo. Decíamos.

-Que la intensa presencia de Mario Conde en Intereconomía Televisión le está proporcionando una plataforma política de primera y entre un electorado muy específico.

-Que refleja la decidida apuesta que ha hecho por él Intereconomía, cuyo presidente, Julio Ariza, ha asumido los contenidos de los informativos.

-Mario Conde ha creado un nuevo partido, Sociedad Civil y Democracia, que se presentará en Galicia, donde puede provocar al PP la pérdida de la mayoría.

 

-Hay muchas lecturas, incluyendo las dificultades económicas que sufre el grupo, que ha tenido que aplicar un ERE que ha dejado en la calle a 160 trabajadores.

-La clave es "la sintonía personal que se ha establecido entre los dos principales protagonistas, que va más allá del simple interés económico o político".

Y el último párrafo afirmaba que ambos protagonistas habían comido varias veces en el pazo de Mario Conde.

A primera hora de la tarde recibí una llamada de Julio Ariza, la segunda. Me encontraba fuera de Madrid desde el viernes, me enviaron el recado y le telefoneé. El presidente de Intereconomía dijo, en síntesis:

"Apezarena, habéis publicado que he comido varias veces con Mario Conde en su pazo. No es verdad. Solamente he estado allí una vez, hace año y medio, y no comimos en el pazo".

De lo que se afirmaba en el resto del artículo, ni media palabra: ninguna queja o puntualización.

Le respondí que iba a comprobar lo de las comidas y en su caso corregirlo, pero él tampoco mostró demasiado interés ni planteó rectificación: "Te lo digo (lo de las comidas) para que tú lo sepas".

Como, insisto, me hallaba fuera de Madrid, llamé a ECD, y me contaron que la fuente de El Chivato es una persona de la confianza personal de Julio Ariza dentro de Intereconomía, conocedor y testigo directo de su relación con Mario Conde.

Se cambio el último párrafo de El Chivato (como se puede leer ahora) para recoger la versión de Julio Ariza.

Tres días después, el jueves, el artículo de Julio Ariza en La Gaceta a toda página. Un texto lleno de acusaciones, de juicios de intenciones y descalificaciones personales (me llama "sicario"). Aunque esta vez las firma el propio editor, con lo que aquella atribución al 'estilo de Carlos Dávila' queda muy entre paréntesis.

Hace referencia a mis circunstancias personales y vitales y, la verdad, son bastante conocidas. Pero es que me dicen, desde dentro del grupo, que a Ariza "le pone a cien" que en El Confidencial Digital se hable de Intereconomía y de La Gaceta, porque piensa que responde a una "ofensiva del Opus". Pues vale.

La pieza contiene también algunas imputaciones bastante peregrinas. Como cuando habla de calumnia "inspirada por personajes parásitos de obispos y cardenales, empeñados en hacer la guerra sucia con dinero de las parroquias y de los fieles a un Grupo de Comunicación" fiel a la doctrina de la Iglesia.

A la vista de todo ello, no puedo menos que deducir que esas treinta líneas de El Chivato han dado en el clavo. Concluyo que han tocado un asunto extremadamente delicado para Intereconomía, vital: la significativa presencia de Mario Conde junto con las dificultades económicas del grupo. Si no, no se entiende tal desbarre, con la firma del editor.

Me parece que Julio Ariza tiene miedo a que algo así se instale en la opinión pública, y eso podría estar detrás de su desmesurada reacción.

A la vez, afirmar que por ese Chivato está en juego el futuro de Intereconomía me parece una exageración. Si el grupo sufre problemas, habrá que culpar a la gestión económica realizada, a la ubicación ideológica y a decisiones periodísticas, pero no a esas treinta líneas.

No tengo nada contra Intereconomía ni contra La Gaceta. Véase el último ejemplo. Y para esas informaciones contactamos regularmente con sus portavoces y altos cargos. Porque en El Confidencial Digital se escribe sobre todos los grupos y medios de comunicación, sin haya un seguimiento especial al que preside Ariza.

Al final, Julio Ariza me aconseja que no apueste por "el 13". Evidentemente se refiere al canal 13 Televisión, del que soy tertuliano. Deducir por ello que tal es mi apuesta mediática sería tanto como concluir que lo es laSexta porque soy tertuliano de Al Rojo Vivo, o Telecinco por las numerosas veces que me llama, o ETB, o Telemadrid, donde me han invitado, o que es ABC Punto Radio porque tengo una sección diaria en el programa de Isabel Sansebastián.

Lo que me lleva a deducir que aquí aparece otro 'miedo' de Julio Ariza: le preocupa mucho la competencia que 13 Televisión plantea a Intereconomía.

En fin, que, habida cuenta de que lo del mal estilo no era asunto exclusivo de Carlos Dávila, y vistas las afirmaciones de Julio Ariza hablando de 'obediencias' y de "parásitos de obispos y cardenales", a lo mejor está llegando el momento de solicitar a quienes me conozcan, a quienes me lean, a quienes me crean, sean muchos o sean pocos, que se planteen dejar de comprar La Gaceta y de ver Intereconomía. A lo mejor.

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