Cruces, ¿por qué derribarlas?

Una cruz tirada a un vertedero.
La cruz tirada a un vertedero.

¿Qué hay detrás de esas acciones vandálicas que acaban derribando cruces solitarias que los pueblos han levantado, a lo largo de los años, y que han acompañado las vidas de sus familias desde hace mucho tiempo?

Decir que son símbolos de un determinado partido régimen político, o de una determinada facción ideológica, no deja de ser poco más que una excusa, por no decir una simpleza que se le ocurre a una cabeza que quiere no enfrentarse directamente con el problema, quizá por el miedo o el odio que le origina.

¿Por qué ese posible miedo; por qué ese odio?  Con ese destrozar cruces y tirarlas al vertedero del pueblo, también han proliferado en estas semanas profanaciones de tumbas, ataques a iglesias, a Sagrarios, etc.  ¿A quiénes puede molestar la presencia de una cruz –normalmente sin Crucifijo-, de una iglesia que invita a recoger un poco el espíritu y elevar el corazón y la mirada al Crucificado, al Hijo de Dios, y desde su costado abierto, a Dios, al Cielo?

La Iglesia, los católicos, siempre han sufrido persecuciones desde sus primeros pasos sobre la tierra, y ya en la misma vida de Jesucristo. Quizá ahora, muchos de los que la atacan, y derriban sus símbolos, son antiguos creyentes que han roto con su Fe, han olvidado la Vida Eterna, y han sustituido en sus corazones el deseo de amar a Dios y de no pecar, por el deseo de no querer recibir de Dios ningún perdón, ningún amor, ninguna Gracia, y se atreven a soñar que Dios no existe.

Ante la Cruz el hombre puede reaccionar de muchas maneras que, al final se pueden reducir a tres.

La primera, amarla de todo corazón, ver en ella, clavado, a Cristo que muere para redimirnos del pecado, darnos a conocer el amor de Dios, y decirnos que “nadie ama más que quien da la vida por sus amigos”.

La segunda, no prestarle el mínimo interés; como si se estuviera delante de un poste de la luz que no le dice absolutamente nada a su mente, a su corazón. Pasa de largo, y no vuelve siquiera la mirada atrás para fijarse en el color de la madera, o de la roca de la que sido arrancada.

La tercera, no soportar la visión de la Cruz y pensar solamente en alejarla de la mirada. ¿Cómo? Haciéndola añicos para no verla ya nunca más. Si la cruz es de granito, de mármol, consistentes y difícil de destrozar, solo cabe desprenderse de ella tirándola a un estercolero, a un barranco. Al cabo del tiempo, desaparecerá de la mirada de los hombres.

Los que destrozan las cruces en un país como el nuestro forman parte, lógicamente, de este tercer grupo. ¿Por qué les molesta? ¿Les recuerda acaso todas sus miserias, todos sus pecados, que no quieren abandonar y dejar de hacer el mal?

 

¿Quieren eliminar la Cruz, porque después de morir en una cruz, Cristo resucitó; y ellos no quieren resucitar?, ¿quieren que la vida del hombre se acabe en la incineración de su cadáver?

¿Les lleva a pensar que su vida no tiene ningún sentido, a verse como unos fracasados después de años de trabajo y esfuerzo; y no ven más allá que las cuatro paredes de la cárcel que ellos mismos han construido a su alrededor? ¿Piensan acaso que destrozando la cruz eliminan de su mirada la perspectiva de la resurrección, de la Vida Eterna, porque no quieren saber nada ni del cielo ni del infierno?

El Crucificado es paciente y misericordioso. Soportó insultos, golpes, todo tipo de injusticias; y su primera palabra en la Cruz fue una petición: “Perdónalos, porque no saben lo que hacen”, dirigida a su Padre Dios.

Ojalá los que han destrozado esas cruces, los que han asaltado esos Sagrarios y esas iglesias, caigan de bruces ante una de esas cruces, oigan esas palabras del Señor, le miren crucificado, y le pidan perdón. Y verán como esas cruces han vuelto a alzarse sobre la tierra, y seguirán ahí hasta la Resurrección final, recordando la Muerte, la Resurrección del Hijo de Dios hecho hombre, que nos abre la puerta de la Vida Eterna: Amor u Odio. Cielo o Infierno.

ernesto.julia@gmail.com

Portada
Comentarios
Envíanos tus noticias
Si conoces o tienes alguna pista en relación con una noticia, no dudes en hacérnosla llegar a través de cualquiera de las siguientes vías. Si así lo desea, tu identidad permanecerá en el anonimato