O’Malley se cae
El cardenal arzobispo de Boston, monseñor Sean O’Malley, ha anunciado que no asistirá al Encuentro Mundial de las Familias e Dublín, que comienza el martes. Como todo cardenal, O’Malley estaba invitado a los actos, especialmente a los del 25 y 26 de agosto, en los que participará el Papa Francisco. Además, estaba previsto que O’Malley diera una conferencia titulada “Salvaguardando a los niños y adultos vulnerables”.
Sin embargo, cuestiones muy parecidas a este asunto sobre el que iba a disertar le impide acudir a Irlanda: la investigación interna que lleva a cabo en el seminario de san Juan de Boston. Según la nota de prensa difundida por la archidiócesis, “cuestiones importantes relacionadas con el cuidado pastoral del Seminario y los seminaristas involucrados en el programa de formación requieren la atención personal y la presencia del cardenal”.
Se trata de los escándalos de abusos sexuales denunciados por dos ex seminaristas que aseguraban en las redes sociales, incluido el muro de Facebook de la propia archidiócesis, que “presenciaron y experimentaron” actitudes inmorales.
O’Malley se merece elogios por dirigir personalmente la investigación de estos escándalos, ya que, como él mismo ha dicho, estos actos son “contrarios a los requisitos de formación de los sacerdotes católicos”.
Como pastor de la Iglesia de Boston, nadie mejor que O’Malley para terminar con esta crisis. El Encuentro de las Familias pierde un gran ponente, pero por una causa mayor. O’Malley hace un gran favor a la Iglesia de Boston y a la Iglesia universal resolviendo él mismo el escándalo de los seminaristas.
Zenón de Elea.
