La gaviota que marcó la fumata blanca
Parecía de broma, pero dio tiempo a comentarlo en todos los medios de comunicación y fue el objeto de las miradas mientras los católicos esperaban la fumata blanca. Una gaviota, tan ancha como ella misma, se posó a las 17:20 sobre la chimenea y allí estuvo durante una hora. Le dio tiempo a darse un paseo de 5 minutos pero volvió erguida con la estampa de un ave segura sobre la trascendencia del momento.
El caso no tiene tanta repercusión, pero resulta llamativo y hasta jocoso que una gaviota se colocase en la única chimenea que todas las cámaras enfocaban. Como se alargaban los minutos y no había humo que saliera, en Twitter comenzó una ola de humor. El hashtag Espiritu Santo llegó a estar entre los tres primeros, por mucho que no fuese una paloma, y no faltó gente que bromeara con la comparación. En vistas a lo ocurrido no está de más que se haga una mirada simbólica, pues quizás Dios movió a la gaviota para anunciar al mundo lo que todos estaban previendo.
