Benedicto XVI llega a Alemania

El viaje a Alemania de Benedicto XVI a empezado con buen pie. Ya en el mismo avión el Papa, como viene siendo habitual en los últimos vuelos, ha afrontado con los periodistas de manera sencilla, las polémicas de su viaje.

Una estrategia de comunicación que ha ido mejorando desde su visita a África en marzo de 2009 y que ha permitido que cuando llega al país de destino, los medios de comunicación se centren en el mensaje del Papa y no en las polémicas que el viaje ha generado.

Esta vez los periodístas en el avión han preguntado al Papa sobre las protestas que ha suscitado este viaje en Alemania. Benedicto XVI ha contestado que respeta "a todos los que están en desacuerdo porque es parte de nuestra libertad" y que él no se opone a ellas cuando esa oposición se muestra de manera civilizada.

Por otra parte, Benedicto XVI también ha explicado que entiende que a causa de los escándalos de abusos sexuales, haya gente que abandone la Iglesia, más aún si han sido víctimas o son personas cercanas a ellas. Pero el Papa ha recordado también que la Iglesia no es una asociación o un club del cual uno se borra cuando está en desacuerdo con otros sino que es la barca del Señor y les animó a ayudarle a combatir a los peces malos desde dentro de la Iglesia.

A su llegada a Berlín el Papa ha sido recibido por el Presidente Alemán Christian Wulff, por la Canciller Ángela Merkel y por varios niños que le han regalado flores y recitado poesías.

Después el Papa se ha trasladado al Castillo de Bellevue, residencia del presidente alemán, para el recibimiento oficial. Allí el Papa ha dicho a los alemanes que no ha"venido para obtener resultados políticos o económicos, sino para encontrar a la gente y hablarles de Dios". Además Benedicto XVI, haciendo referencia a la crisis que atraviesa la sociedad actual, dijo que "el mundo necesita una profunda renovación cultural y el redescubrimiento de valores de fondo sobre los que construir un futuro mejor".

El Papa después de reunirse en la sede de la Conferencia Episcopal Alemana con la Canciller Angela Merkel, por la tarde ha hablado en el parlamento alemán al que se ha dirigido como legislador, compatriota y Papa. Benedicto XVI ha sido recibido con una gran obación y ha exhortado a los diputados a reflexionar sobre el criterio de justicia.

La última etapa del día de hoy es la Misa multitudinaria que celebra en el estadio olímpico de Berlín a la que han participado las más altas autoridades alemanas y el arzobispo de Madrid, el cardenal Rouco Varella.

 

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