París, Texas
París
El pasado mes de enero el mundo asistió atónito y espantado a la matanza de 12 dibujantes y periodistas de Charlie Hebdo, el semanario satírico parisino. Los autores del vil atentado terrorista fueron dos hermanos franceses de origen magrebí, Chérif y Said Kouachi, de 32 y 34 años de edad. Tras emprender una loca huida en la que secuestraron a un rehén, los hermanos yihadistas fueron abatidos por la Policía gala a 40 kilómetros de París, un día más tarde de cometer la matanza. La revista, que no era la primera vez que publicaba caricaturas de Mahoma, cuya representación está prohibida por el islam, ya había sido amenazada y atacada con anterioridad, aunque sin causar víctimas mortales. Pese a ello, tal y como tristemente se pudo comprobar, el semanario no había tomado medidas significativas para garantiza la seguridad de sus trabajadores. El dibujante Luz, nuevo responsable de Charlie Hebdo, ha asegurado que no volverá a dibujar a Mahoma. "Ya no me interesa. Estoy cansado", declaró en una reciente entrevista para la revista Les Inrockuptibles.
Texas
La tarde del pasado domingo otros dos hombres también murieron por disparos de la Policía. En este caso, fue a la entrada de un centro cultural donde se celebraba una muestra de caricaturas e imágenes de Mahoma en la localidad de Garland, cerca de Dallas (Texas, EE.UU.). El acto estaba organizado por una asociación a favor de la libertad de expresión y crítica con el islam llamada American Freedom Defense Initiative.
En torno a las 19:00 (hora local) dos hombres estacionaron su vehículo cerca del Centro Curtis Culwell, donde se celebraba una muestra/concurso de imágenes de Mahoma. Los asaltantes comenzaron a disparar e hirieron levemente en el tobillo a un guardia de seguridad. La Policía respondió con un tiroteo. Uno de los hombres armados fue abatido de inmediato y el otro murió por disparos cuando al parecer cogía una mochila que podría contener explosivos. El portavoz policial, Joe Harn, aseguró a Reuters poco después del tiroteo que desconocía quiénes eran los dos asaltantes. Los organizadores contaban con la polémica que podía generar su "primera exposición anual y concurso de arte sobre Mahoma", por lo que habían contratado a 40 agentes de seguridad.
- Zenón de Elea.
