Un estudio refleja que los inmigrantes necesitan más atención pastoral de la Iglesia
Se presenta el proyecto europeo FamiliesAndSocieties en la Pontificia Universidad de la Santa Cruz
En el marco del Sínodo de la Familia, se ha presentado en Roma el proyecto europeo FamiliesAndSocieties. La exposición corrió a cargo del profesor de sociología de la Universidad de Zaragoza, Pablo García Ruiz, miembro del equipo de este proyecto de investigación más importante realizado hasta la fecha sobre la situación de la familia en Europa y las políticas familiares adecuadas a sus necesidades. Los resultados finales estarán en 2017.
Uno de los primeros datos que arroja este estudio es la necesidad de dedicar más apoyo social (y, por lo que se refiere a la Iglesia, más atención pastoral) a las familias más vulnerables: las monoparentales, las familias con personas dependientes y las familias numerosas.
Entre las familias dependientes, la investigación incluye a numerosas familias de inmigrantes, que tienen problemas y necesidades específicas relativas al idioma, la carencia de una red familiar cercana, la infravivienda, y los problemas referidos a la separación y la reagrupación: “Requieren ayudas específicas”, recordó García Ruiz.
El profesor de sociología celebró la iniciativa del Papa Francisco de dedicar los sínodos de 2014 y 2015 a la familia: “Como demuestran nuestros datos, ayudar a la familia es clave para el desarrollo de un pueblo, y el acompañamiento de la Iglesia puede resultar de gran ayuda”, señaló durante la presentación de este proyecto, que tuvo lugar en el marco de los coloquios organizados por el curso de especialización en información religiosa de la asociación ISCOM y de la Pontificia Universidad de la Santa Cruz.
El profesor puso de relieve que “en el Instrumentum laboris del Sínodo de la Familia se encuentran los mismos retos que hemos detectado empíricamente sobre la familia en Europa”.
Este proyecto de investigación se desarrolla en el marco de la Unión Europea y está financiado principalmente por Bruselas. Cuenta con el apoyo de 25 entidades universitarias de 15 países y está coordinado por la profesora Livia Sz. Oláh, de la Universidad de Estocolmo.
Cultura de la prevención
Para el profesor de Sociología, los datos de este estudio deberían desencadenar políticas familiares y acompañamiento eclesial para promover una cultura de la prevención. Las líneas de trabajo deberían ir, por un lado, en dedicar más apoyo social y por otro, favorecer “por todos los medios posibles la conciliación entre trabajo y familia”, impulsando, entre otras medidas, políticas de corresponsabilidad en las tareas del cuidado y del hogar. “La estabilidad y estilo parental adecuado producen mayor bienestar y mejores oportunidades en la vida de los hijos”, señaló.
Otros datos que recoge el proyecto FamiliesAndSocieties son los siguientes:
– La familia sigue siendo la institución social más valorada en Europa (para casi el 90% de la población), por encima de los amigos, la religión o la política.
– Se constata una caída de la nupcialidad: hoy solo se casan 4 de cada 1000 habitantes por año. Entre las causas están el desempleo entre los jóvenes, los bajos salarios y la dificultad de acceso a una vivienda digna.
– En todos los países europeos el número de hijos deseado es superior al número real de hijos por familia debido también al alto coste de la vivienda (39%), la dificultad de conciliar trabajo y familia (25%) o la necesidad de atender a personas ancianas o enfermas (23%).
– Paralelamente, los divorcios han aumentado un 25% en los últimos 20 años. Para García Ruiz, “las autoridades civiles deberían realizar un trabajo sinfónico –asistencia social, educación, cultura- de prevención de las rupturas, siempre que sea posible”.
