Iceta quiere resolver la “anómala” situación

El Vaticano piensa en reabrir el debate sobre una provincia eclesiástica exclusivamente vasca con sede en Bilbao

La creación de una provincia eclesiástica vasca única, que incluyera a Bilbao, Vitoria y San Sebastián -sin Navarra- es una idea que ha estado varias veces sobre la mesa de la Curia vaticana, la última hace dos años. Ahora el debate podría reabrirse.

Los obispos de Bilbao, Vitoria y San Sebastián
Los obispos de Bilbao, Vitoria y San Sebastián

 Los actuales límites eclesiásticos, con los tres territorios divididos como miembros de dos provincias distintas -Burgos y Pamplona-Tudela- datan de 1949, cuando la Santa Sede decidió la fragmentación de la potente e influyente diócesis vitoriana por las presiones políticas del régimen franquista, que luego se materializó con la adscripción de los obispados a diferentes demarcaciones.

La última iniciativa para recomponer las fronteras eclesiásticas se fraguó en 1997, pero fue frenada por el Gobierno de José María Aznar. Antes, tras el final de la dictadura, una parte importante del clero se dirigió a Pablo VI para reclamar una provincia que incluyera, además, los territorios del País Vasco francés.

Según detalla el Diario Vasco, La Sagrada Congregación para los Obispos, el 'Ministerio' competente para estudiar y decidir los límites eclesiásticos de las diócesis, retomó esta vieja reivindicación de la Iglesia vasca poco antes de la primavera de 2012 con el objetivo de ofrecer una solución inteligente a una cuestión que siempre se ha sacado de los railes eclesiales y ha acabado en el debate político.

El modelo que la Congregación estudiada era el de unir Bilbao, Vitoria y San Sebastián en una única demarcación, con la categoría de archidiócesis que tendría su sede en la capital vizcaína.

En el primer trimestre de 2012, la Santa Sede evaluó los cambios que se estaban produciendo en Euskadi. Por un lado, las diócesis están al mando de obispos naturales del país, pero sin ninguna sospecha de ser nacionalistas. José Ignacio Munilla fue nombrado obispo de San Sebastián el 21 de noviembre de 2009 y Mario Iceta, titular de la de Bilbao, el 24 de agosto de 2010. Ambos son prelados jóvenes a los que le queda mucho mandato por delante. Miguel Asurmendi, en Vitoria desde septiembre de 1995, tiene que presentar su dimisión reglamentaria el próximo año, en marzo, y ya circula por ahí alguna terna oficiosa para relevar al salesiano navarro.

En el marco de un nuevo pontificado y con un Episcopado español en vías de renovación, incluida la sede de Vitoria, existe una convicción clara y generalizada de que es un asunto a resolver porque no es razonable la organización actual.

De hecho, Monseñor Iceta, preguntado la semana pasada en Radio Euskadi sobre este particular, reconoció que es una división anómala, porque pastoralmente no es justificable o adecuado que realidades tan hermanas como las tres diócesis vascas pertenezcan a provincias separadas. El obispo de Bilbao considera que habría que ver cuál es la fórmula mejor, en la que todos se sientan cómodos y nadie se sienta incómodo.


 

Video del día

Marta Rovira confirma que negocia con Sánchez
un referéndum de independencia para Cataluña
Portada
Comentarios
Envíanos tus noticias
Si conoces o tienes alguna pista en relación con una noticia, no dudes en hacérnosla llegar a través de cualquiera de las siguientes vías. Si así lo desea, tu identidad permanecerá en el anonimato