El obispo de Segovia critica "la falsa y sucia campaña manipuladora por parte del PSOE" con el IBI
La exención del pago del Impuesto de Bienes Inmuebles en algunos edificios de la Iglesia -los dedicados al culto y a obras de caridad- se ha convertido en espada de batalla de numerosos municipios, muchos de ellos gobernados por el PSOE. En su última carta pastoral, el obispo de Segovia arremete contra "la falsa y sucia campaña manipuladora por parte del PSOE".
En opinión de monseñor Rubio, los argumentos para que se elimen la exención están cargados de "demagogia y cinismo" y pretenden que la sociedad exiga al a Iglesia que haga "un esfuerzo como lo está haciendo todo el mundo". Explica en su misiva a los fieles que los socialistas llevan ya cinco meses acusando a la Iglesia de unos falsos privilegios. El obispo considera que la acusación carece de sentido ya que la actual legislación estipula que todas las organizaciones sin ánimo de lucro están exentas de pagar el IBI. Además, "la Iglesia paga el IBI de todos los inmuebles que no estén exentos por ley", dice.
Rubio Castro puntualiza en la carta ue la cuestión del IBI "está regulado por los Acuerdos Económico suscritos entre el Estado Español y la Santa Sede y la Iglesia cumple escrupulosamente con las indicaciones del Concordato y la ley de Mecenazgos que afecta a todas las actividades sin ánimo de lucro que trabajan en España". Recuerda además que la Iglesia no es la única institución que por ley no tiene que abonar este impuesto. También quedan exentas entre otras, "las fundaciones, las asociaciones de utilidad pública, las federaciones deportivas, los partidos políticos, los sindicatos, las iglesias evangélicas, las comunidades hebreas y musulmanes". Rubio pone de ejemplo de que en Madrid no pagan el IBI el museo del Prado, la SGAE, el Hotel Ritz, el Palacio de Liria, entre otros., porque así lo regula la Ley de Mecenazgo.
En la carta finalmente reconoce el papel de la Iglesia como "una Iglesia fueza viva" y reivindica que la Iglesia llega allí donde el Estado no puede porque actúa como "una instancia burocrática que no puede asegurar lo más esencial que el hombre afligido —cualquier ser humano— necesita: una entrañable atención personal".
Aprovecha monseñor Rubio para aclarar una confusión generada en las redes sociales respecto a cuánto dinero donan los obispos a Cáritas. Explica que por un lado está la donación procedente del Fondo Común Interdiocesano, que ha aumentado de año en año y este año ha sumado 5 millones de euros. Pero que ahí no se contabiliza lo recibido por las Cáritas diocesanas, "una verdader red que llega a todos por medio de las Cáritas parroquiales".
