El País no tiene quien le informe
Al diario El País solo le quedan las portadas de tesis. Hace décadas había novelas de tesis, ahora hay periódicos de tesis, y no precisamente lo que se confiesan católicos. Las tesis son laicistas, relativistas y anti-Iglesia. Ojo que, además, nos encontramos con una portada anzuelo. Seguro que hay alguien que pica.
La portada del diario del grupo "PRISA" del domingo 9 de diciembre de 2012 dice que "Wert y la Iglesia negociaron con sigilo la religión en la enseñanza". Resulta que es ahora la Iglesia la que le ha impuesto al ministro Wert la reforma de la enseñanza, por eso de la religión, y además con nocturnidad y alevosía. O se esté refiriendo a una picia más del ministro Wert.
Uno de los problemas a los que se enfrenta la Iglesia en la España contemporánea es la conversión e identificación de su imagen, y de su presencia, en interlocutor político permanente de lo atávico social. La estrategia de la izquierda de hacer de la Iglesia el enemigo público número uno del progreso de la sociedad española está dando sus frutos. No en vano, el diario que nos ocupa, está encargado, por sistema, de recordar que hay una institución que ha perdido enteros de credibilidad, que ha descendido en aprecio social, y esa es la Iglesia. Hay quien afirma incluso que una de las verdaderas transiciones de la sociedad española es la pérdida de capacidad de prescripción de la Iglesia católica.
Volvamos a un texto, firmado en Sevilla, por eso de que la inspiración principal, según un somero análisis de fuentes, está en la Junta de Andalucía, venero permanente de la orientación. Dice que los obispos van a conseguir una victoria esperada desde hace mucho tiempo. Pero lo que no dice es que quienes van a conseguir esa victoria son los padres que eligen la religión católica para sus hijos, y por el mismo principio, los que no la eligen. Y no afirma que quien va a triunfar es la Constitución española, la libertad de educación y los Acuerdos Iglesia-Estado, que son garantía de la correcta comprensión tanto del Estado como de la Iglesia, es decir, de la ley, y del orden constitucional.
Habla la noticia de una reunión entre los responsables de la Comisión Episcopal de Enseñaza y Catequesis con la Secretaria de Estado del ramo. Peor no da datos de la reunión. Menos mal. Lo que demuestra el diario El País es que ha oído campanas, pero no sabe dónde. No seré yo quien le dé más información de los interlocutores de esa reunión y de lo que pasó, porque, precisamente, no avalaría la tesis de la noticia. Entraríamos en otro orden de la responsabilidad moral. ¿Por qué no cuenta este periódico cuántas reuniones han mantenido los responsables del ministerio con los actores socales implicados en el sector educativo? Reuniones de las que nada se sabe. Por cierto, los números que ofrecen de los alumnos que eligen religión católica, en un plebiscito anual, no coinciden con los que ha hecho públicos la Conferencia Episcopal. Podrían haber utilizado esta fuente y haber contrastado las cifras.
En resumen ya para no cansar a los lectores. Arrecia la campaña de la izquierda contra la religión en la escuela, uno de los baluartes del agitprop del pensamiento laicista en nuestro país. Y lo hacen en el El País. Por cierto, ¿no es el periódico del grupo en el colaboraba el hoy ministro de educación, en las tertulias, con sus artículos...?
