El Nuncio en España se ha tomado unas vacaciones tras la intensidad del trabajo antes y durante la JMJ
Renzo Fratini, Nuncio de la Santa Sede en España, se ha tomado unas bien ganadas vacaciones fuera de Madrid, iniciadas nada más concluir los actos de la Jornada Mundial de la Juventud, cuya organización y celebración le obligó a un notable esfuerzo personal.
El nuncio estuvo muy directamente implicado en la JMJ, con algunas gestiones más de fondo, como por ejemplo las que tenían que ver con la relación con el Gobierno. Según ha sabido Religión Confidencial, una de sus gestiones más delicadas tuvieron como destinataria la ministra de Asuntos Exteriores, Trinidad Jiménez.
El representante del Vaticano llamó a la ministra, y a continuación la recibió en la Nunciatura, para manifestarle que, durante los actos de la JMJ y la presencia de Benedicto XVI en España, la Santa Sede no quería 'interferencias' con los promotores del 15 M y demás organizaciones de protesta.
Una petición que, a la vista de lo ocurrido en Madrid, y en concreto de los incidentes provocados por la 'marcha atea' y posteriores manifestaciones, no fue atendida adecuadamente por el Gobierno de la nación.
