Gran sprint final de Benedicto XVI para acabar 2011
Normalmente diciembre y Pascua, son los dos momentos del año de mayor actividad para el Papa. Si consideramos que en los últimos meses se había limitado mucho la agenda de Benedicto XVI por motivos de edad y de salud, sorprende mucho que tenga tantos encuentros y ceremonias previstas para el último mes del año.
Además de las tradicionales audiencias con los peregrinos los miércoles y el rezo del ángelus los domingos, el Papa comenzará el mes recibiendo al presidente de Ucrania que le entregará un regalo muy especial. Se trata del árbol de navidad que será colocado en la plaza de San Pedro. El 7 de diciembre, el Papa encenderá a distancia, gracias a un iPad, el árbol de navidad más grande del mundo situado en Gubbio, en el centro de Italia.
Como cada año, el 8 de diciembre Benedicto XVI visitará la imagen de la Inmaculada en la plaza de España en Roma. Una visita organizada por la embajada de España ante la Santa Sede y que normalmente cuenta con la participación de algún coro español. Tres días más tarde, el Papa, como obispo de Roma, visitará una de sus parroquias, la de Santa María de las Gracias que se encuentra en un barrio periférico de la ciudad.
Uno de los platos fuertes llegará el 12 de diciembre, fecha en la que el Papa celebrará en la Basílica de San Pedro una Misa con toda la comunidad de latinoamericanos en Roma, para celebrar el bicentenario de la independencia. En esa ocasión el Papa anunciará su visita a la ciudad mexicana de Guanajuato y a Cuba el mes de marzo de 2012. El día 15 Benedicto XVI se reunirá con los universitarios de Roma para preparar la navidad. Una cita tradicional que el año pasado no se celebró.
Otro encuentro muy especial tendrá lugar el 18 de diciembre. El Papa visitará la cárcel romana de Rebibbia. Ahí tendra una charla con 300 detenidos muy al estilo Ratzinger con preguntas y respuestas. El mes concluirá con las tradicionales citas de la felicitación de Navidad a la Curia romana el día 22, la Misa de Navidad la noche del 24, la bendición Urbi et Orbi el día 25 y el rezo de las vísperas y el Te Deum la tarde del 31 de diciembre.
