Desplante de la ministra Dolores Delgado a las confesiones religiosas
Fueron convocadas a una reunión de la Comisión Asesora de Libertad Religiosa que iba a presidir la titular de Justicia, pero al final no asistió
La ministra de Justicia, Dolores Delgado, dejó colgadas a las representaciones de confesiones religiosas, al no asistir a una reunión con ellas en las que estaba anunciada su presencia.
El pasado miércoles, cinco de diciembre, se convocó a una reunión ordinaria de los miembros de la Comisión Asesora de Libertad Religiosa, del Ministerio de Justicia, bajo la presidencia de la ministra.
Allí estaban los representantes de la Iglesia Católica y de las comunidades judías, islámicas, protestantes, budistas, de la ortodoxia y de la Iglesia de Jesucristo de los Santos de los últimos días, además de los expertos gubernamentales y los representantes de las instituciones públicas.
La ministra no asistió
Era la primera vez que esta Comisión se reunía bajo el mandato del Gobierno socialista. Las confesiones religiosas tenían un alto interés por expresar oficialmente a la ministra algunas cuestiones de relevancia para el ejercicio actual de la libertad religiosa en España.
Y, como suele ocurrir, Dolores Delgado, “por razones de agenda”, no se presentó en la reunión que hubiera debido presidir. Lo hizo en su nombre la Directora general de Cooperación Jurídica Internacional, Relaciones con las confesiones y Derechos Humanos, Ana Gallego Torres, quien excusó a la ministra.
Varios representantes de las confesiones religiosas han manifestado a Religión confidencial su malestar por la ausencia de la ministra y por el hecho de que esta Comisión se vea sometida al vaivén de los cambios políticos en una cuestión clave en la política de Estado sobre la libertad religiosa.
Para las confesiones religiosas minoritarias en España, la Comisión Asesora de Liberta religiosa es uno de los ámbitos más importantes de su interlocución con el Estado.
