Nueva carta de la Santa Sede a los sacerdotes y obispos chinos: les recuerda su tarea de unidad con el Papa y entre los propios católicos
Tras continuados esfuerzos de las autoridades chinas de buscar la desunión y confusión entre los católicos, la Santa Sede insiste en una nueva carta a sacerdotes y obispos, en su tarea fundamental de trabajar por la unión de los cristianos de su país en un doble sentido: con el Papa y entre ellos mismos.
Aunque el redactor de la carta, el cardenal Ivan Dias, no lo cita, de fondo está el complicado entramado creado por la Iglesia Patriótica China, una iglesia paralela controlada por el Gobierno comunista.
El Prefecto de la Congregación para la Evangelización de los Pueblos les recuerda el "importante papel de un obispo o de un sacerdote como agentes de unidad en el seno a la Iglesia de Dios", subrayando que esta tarea tiene una dimensión doble y comporta la comunión con el Papa, la piedra sobre la que Jesús edificó su Iglesia y la unión de los miembros que forman parte de ella.
Asimismo, Dias reconoce "todo lo que algunos de vosotros han sufrido en el pasado reciente a causa de su fidelidad a la Santa Sede y les rendimos homenaje.
La carta concluye con una alabanza a Dios "por los esfuerzos realizados o los que se están realizando por la unidad dentro de la Iglesia, en respuesta fiel a las indicaciones dadas por el Santo Padre en la carta que dirigió el 27 de mayo de 2007, y por los resultados obtenidos hasta ahora. Que Dios bendiga vuestras iniciativas para que la unidad entre los pastores y entre sus rebaños sea cada vez más sólida en Cristo y en su Iglesia "ad maiorem Dei gloriam".
