Desconectar al bebé Alfie Evans no es una forma de eutanasia encubierta
Los obispos de Inglaterra y Gales respaldan la actuación profesional de los médicos del hospital Alder Hey
El caso del bebé inglés Alfie Evans, que padece una grave enfermedad degenerativa “irreversible” diagnosticada por los médicos del hospital Alder Hey, centro que ha decido desconectar al niño de su soporte vital, se ha interpretado en algunos sectores como una eutanasia encubierta. Pero desde la Conferencia Episcopal de Inglaterra y Gales no piensan lo mismo.
El comunicado de la conferencia episcopal de Inglaterra ha defendido “la profesionalidad y el cuidado de los niños gravemente enfermos del Alder Hey Hospital” e insisten que su labor debe ser reconocida.
Esta nota ha descolocado a no pocos católicos, a tenor de la lucha de los jóvenes padres del bebé por mantener vivo a su hijo, que ha tenido bastante impacto mediático.
Fuentes de la Conferencia Episcopal británica han contestado a la pregunta de Religión Confidencial: ¿Desconectar al bebé es una especie de eutanasia encubierta?
“No, en absoluto. Hay detalles específicos en todos estos casos que se pierden en el ruido mediático. Mucha información aparecida en la prensa tiene un tono muy emocional. Los médicos son muy profesionales y en todo momento están velando por el bien absoluto del bebé. Tenemos que fiarnos de su honradez y de su profesionalidad”, responden desde la Conferencia Episcopal de Inglaterra.
Críticas infundadas
Los obispos católicos ingleses defienden de esta manera al hospital: “Sabemos que las críticas públicas recientemente reportadas sobre su trabajo son infundadas ya que nuestra atención de capellanía hacia el personal, y ofrecida a la familia, se ha proporcionado de manera constante”.
En el comunicado, la Conferencia Episcopal de Inglaterra toma nota de la oferta del Hospital Bambino Gesu en Roma para cuidar a Alfie Evans. “Para el hospital, es en los tribunales británicos donde deben tomarse las decisiones cruciales en los conflictos de opinión y aportar las razones médicas para que se haga una excepción en este trágico caso”.
Según las fuentes consultadas por RC, la Justicia británica no ha fallado a favor de los padres del bebé de ingresar a su hijo en el centro pediátrico italiano porque, según el hospital británico, el traslado sería perjudicial para la salud del niño.
Por su parte, el hospital Alder Hey publica casi diariamente comunicados de prensa informando del estado del niño y de las resoluciones judiciales que se van tomando.
Aceptar el límite
“A veces hay que aceptar que los cuidados médicos tienen un límite”, señalan las mismas fuentes.
Asimismo, añaden que, en este caso, la Iglesia no aprueba el ensañamiento terapéutico y que no estaría en contra de la doctrina católica desconectarle.
El Papa Francisco recibió el miércoles pasado en la Audiencia General a Thomas Evans, el padre del bebé, y aprovechó esta visita para proclamar que el “único dueño de la vida es Dios y que es nuestro deber hacer todo lo posible por custodiar la vida”.