Moncloa diseñó debates en medios afines sobre la Ley de Reforma Religiosa. Se iba a aprobar en el Consejo de Ministros del viernes
Moncloa había diseñado para esta semana una estrategia de comunicación en medios afines para debatir la nueva Ley de Libertad Religiosa. Según fuentes de Religión Confidencial, el borrador se iba aprobar en el Consejo de Ministros del pasado viernes por orden del presidente del Gobierno, y él mismo decidió cambiar los planes.
La Reforma Ley de Libertad Religiosa lleva planeando sobre la opinión pública dos años. Es uno de los cambios legislativos anunciados a bombo y platillo por el Gobierno. En los últimos meses se sospechaba que el borrador de la nueva ley sería usado como golpe de efecto para distraer el debate sobre las medidas adoptadas contra la crisis económica.
Según las noticias a las que ha tenido acceso este confidencial, ese momento había llegado el pasado viernes. Justo un día después de la aprobación por un sólo voto de las medidas de ajuste del Gobierno.
Fuentes de las confesiones religiosas afectadas por la nueva ley han confirmado a Religión Confidencial que todo se paralizó a última hora porque el propio presidente del Gobierno decidió posponer el golpe de efecto.
La aprobación del borrador de Reforma de la Ley de Libertad Religiosa fue prometida por el Gobierno para antes del verano. El propio director general de Relaciones con las Confesiones, José María Contreras, admitió a Religión Confidencial esta semana que sería presentada antes de julio.
Aún no se conocen detalles concretos de ese borrador que se espera que, sobre todo, afecte a las confesiones religiosas minoritarias -musulmanes, judíos y evangélicos- en cuestiones como la cesión de terrenos por parte de los ayuntamientos para la construcción de lugares de culto.
Otro de los grandes capítulos afectará a la presencia de símbolos religiosos en actos y edificios institucionales.
