El “ático de lujo” y la terraza de Tarcisio Bertone

Bertone
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El ático de Tarcisio Bertone, ex Secretario de Estado de la Santa Sede, ha vuelto a ser motivo de viva polémica en Italia (y también en la prensa española), tras la publicación en un semanario de que la reforma había sido pagada en parte (200.000 euros) con fondos donados para el funcionamiento del hospital pediátrico Bambino Gesù, una especie de geriátrico del Vaticano.

La información iba firmada por Emiliano Fittipaldi, uno de los periodistas procesados por la Santa Sede por la publicación (en un libro) de documentos sobre las finanzas vaticanas.

Las investigaciones sobre la reforma se centran en dos ex directivos del hospital, pero el suceso ha traído de nuevo a colación el llamado "ático de lujo" del cardenal.

Personas que han visitado la actual residencia de Bertone cuentan a Religión Confidencial que el inmueble es un viejo palacio, bastante feo, propiedad del Vaticano, en el que han residido y residen cardenales tras haber dejado de tener cargo en la Santa Sede, como es el caso de Attilio Nicora, obispo emérito de Verona y presidente emérito de la Administración del Patrimonio de la Sede Apostólica

Se trata de pisos de características semejantes para todos ellos: grandes (300 metros cuadrados), de los años 30, no demasiado confortables. Cuando lo asignaron a Bertone estaba vacío. En su caso, el ático es en realidad la última planta del edificio.

Y sobre la famosa "terraza" que le atribuyen, se trata de la terraza comunitaria, que estaba bastante abandonada: por ejemplo, acoge los aparatos de aire acondicionado. Todos los inquilinos tienen derecho de acceso, si bien Bertone, por ocupar el último piso, disfruta de salida directa.

 

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