Uno de los mejores Munilla
El libro "Dios te quiere feliz" habla de las heridas afectivas, de la educación, del amor humano, del matrimonio y de la familia
Ya me parecía que don José Ignacio Munilla, con todo lo que tiene en San Sebastián, su diócesis, no habría tenido mucho tiempo para escribir un libro. Por eso hay que agradecerle que, en las primeras páginas, aclare cuál es el secreto de este volumen.
El 15 de agosto pasado recibió un correo de Marta Moreno Candel en el que le proponía reunir varias conferencias, intervenciones, charlas, trabajos suyos de los últimos tiempos, darles una forma tractiva, y publicarlos como libro formativo y, también, de lectura espiritual.
Aquí tenemos pues la clave de este “Dios te quiere feliz”, probablemente, uno de los mejores Munilla. Es decir, la esencia de un obispo que se caracteriza por no arredrarse ante las dificultades, no tener miedo, no perder la esperanza.
Un obispo que mira al horizonte de la fe a la cara, como mira a cada uno de los que con él se cruzan. Un obispo, al fin y al cabo, que está acostumbrado a salir al paso de la actualidad, coger el toro por los cuernos y llevarlo a dónde corresponda. Un obispo que tiene cosas que decir y que sabe decirlas, quizá por esa experiencia que ha adquirido en los micrófonos de Radio María, en dónde no solo tiene oyentes, tiene seguidores, por no decir, fans.
Una propuesta fresca
Hay en este volumen una propuesta, fresca muy fresca, aseada, como una bodega de buen vino, de varias temáticas, que tiene un hilo coincidente, la construcción interior espiritual de la persona.
El libro habla de las heridas afectivas, de la educación –en particular, la educación de los deseos-, del amor humano, del matrimonio, de la familia. Y también de algunos fenómenos espirituales comunes en nuestro tiempo: las falsas espiritualidades, el discernimiento, la guía del Espíritu Santo, el encuentro y enamoramiento de Cristo, la conversión, la espiritualidad del Corazón de Jesús, la misericordia, la devoción filial a la Virgen María, y uno que me ha gustado especialmente referido a cómo superar la mediocridad en la vida espiritual.
De lo que trata el libro, al fin y al cabo, es de la experiencia de tantas personas con las que se ha cruzado don José Ignacio, a las que ha escuchado, a las que ha consolado, a las que ha dedicado tiempo y palabra.
Otra de los valores de este libro de don José Ignacio es el modo de argumentar, los ejemplos que utiliza, el lenguaje claro y directo, sencillo, sin tecnicismo.
Como dice Léon Bloy, “solo hay una desgracia: no ser santos”.
Y en esa propuesta de camino de la santidad, recoge nuestro autor, como cierre del libro, una cita de mi admirado J. M. Cabodevilla: “No sabemos cuál es el mayor don divino: si el que Dios nos ame, o el que nos permita amarle”.
Dios te quiere feliz.
Monseñor José Ignacio Munilla.
Palabra.
pserrano@planalfa.es