Una nueva versión actualizada de 1984
La novela “Persona. Del yo al Tú” del profesor de filosofía Javier Barraca, puede ser entendida como una actualización de la obra de George Orwell
- Una actualización de la novela de George Orwell
- Una sociedad secreta llamada "persona"
- Limitar la acción de los padres
- Manipulación de los adultos contra los niños
Se presenta este libro como el V Premio Didaskalos de novela. Por lo tanto debe considerarse como una novela seleccionada y elegida como la mejor de las que se han presentado a esta iniciativa editorial de los siempre ejemplares Discípulos de los Sagrados Corazones de Jesús y María, un Instituto religioso, de raíz ignaciana, cuyas iniciativas son siempre encomiables.
Pero esta novela no lo es sólo por el hecho de que haya alcanzado el premio de su publicación en la colección Didaskalos novela. Lo es por su factura estilística y, sobre todo, por su contenido, por su propuesta.
La literatura ha servido no solo para idear universos imaginarios. También nos ha hecho entender en qué mundo vivimos, nos ha ayudado a tomar conciencia, percibir la realidad del mundo vida, para darnos cuenta del mundo en el que vivimos.
Una actualización de la novela de George Orwell
Esa novela, del profesor de filosofía de la Universidad Rey Juan Carlos, Javier Barraca, que sigue una línea escuela de filosofía personalista, puede ser entendida como una actualización de 1984 de George Orwell.
Una actualización en el hoy de nuestra historia con los elementos recurrentes de lo que significa una sociedad que está basada en la autodeterminación de la persona, en el individualismo, en la tolerancia, pero sólo en la epidermis social.
Lo que hay detrás de esta sociedad, tendente al gregarismo autoritario, es una forma de vida que se vuelve en contra de la libertad, de la naturaleza de la persona.
Una sociedad secreta llamada "persona"
Voy a hacer una breve referencia al argumento de esta novela para destacar una idea que, aunque puede parece circunstancial en el curso de la trama, me ha parecido clarificadora.
El protagonista principal se llama Miguel. Filósofo de profesión, como el autor –son inevitables, por cierto, algunas referencias autobiográficas-, entra a formar parte de una sociedad mundial secreta, o discreta, que se llama “Persona”.
Una sociedad que, aparentemente, defiende los Derechos Humanos, entendidos desde su peculiar forma de concebir la Tolerancia. Una sociedad a la que pertenece lo más granado de las élites sociales en el mundo, y en España, con una estructura y con una importante capacidad operativa. De hecho es una sociedad global dedicada a la praxis, a la acción.
Limitar la acción de los padres
Los principios sobre los que se articula la identidad de esta sociedad son los que se imponen en el universo conceptual predominante hoy. “Persona está llamada a una alta misión, desde luego: hacer triunfar el individualismo moderno, la dignidad del sujeto autónomo, por encima de todo y sobre todo”.
En su actuación, Persona emprende una campaña dedicada a limitar la, según ellos, nefasta acción de los padres, de los profesores, de los educadores, en los niños a través de su pretensión de inculcarles sus ideas sobre el mundo, la historia, sobre sus creencias. Persona lanza una campaña, también mediática, para reivindicar la autonomía de los niños frente a la agresión que supone su educación. De este proyecto se deduce también una pedagogía.
Como comienzan a aparecer voces críticas contra esta campaña, Persona da un paso más y deja a un lado esta campaña para acelerar otra más dura, la campaña contra la pederastia, contra los abusos sexuales, de poder y de conciencia. Simplemente sacan las conclusiones de una lógica perversa.
Manipulación de los adultos contra los niños
La primera campaña estaba dedicada a denunciar la manipulación de los adultos contra los niños a nivel ideológico. La segunda debe ir hasta el extremo de esa manipulación, que es la de la pederastia, la degradación máxima de la manipulación de la infancia.
Si una campaña “soft”, fluida, ligera, no funciona, vayamos a una campaña en la que pongamos en evidencia a la ideología de Persona llevada hasta sus últimas consecuencias.
¿Cuál es el enemigo de Persona? Las creencias, la fe de las personas. Por tanto, ¿a quienes quiere Persona expulsar del sistema? A las Iglesias, a las organizaciones de creyentes, a las confesiones religiosas.
¿Le suena? Lean esta novela.
Persona. Del yo al Tú.
Javier Barraca
Didaskalos literatura
