La apretada agenda de Francisco en Brasil
El primer viaje internacional de Francisco se acerca. La Jornada Mundial de la Juventud de Río de Janeiro, siete días con una agenda extenuante.
El Vaticano ha publicado el programa que seguirá durante esos siete días en Brasil y que podría resumirse en una verdadera maratón.
Tras 12 horas de viaje Francisco llegará a Río de Janeiro el 23 de julio. Nada más bajar del avión tendrá el primer encuentro oficial con la presidenta de Brasil, Dilma Roussef. Al día siguiente, martes 24, el Papa visitará el Santuario de Aparecida. Allí rezará ante la Virgen, tal y como hizo en 2007 durante la reunión que mantuvieron los obispos de América Latina y el Caribe y de la que él fue uno de las voces más importantes. En Aparecida celebrará una misa con algunos obispos, sacerdotes y seminaristas. Después volverá a Río de Janeiro para visitar el hospital de San Francisco de Asís.
El 25 de julio, jueves, le entregarán las llaves de la ciudad y bendecirá las banderas olímpicas en el ayuntamiento de Río. Por la tarde se trasladará a la comunidad de Varginha, que es una de las zonas de favelas de la ciudad. Y a las seis de la tarde de ese mismo día dará. Comienzo la primera Jornada Mundial de la Juventud de su pontificado. La ceremonia de será en la playa de Copacabana, en donde le esperarán miles de jóvenes. Algunos de los datos facilitados hace meses por la organización apuntaban a más de dos millones y medio de participantes. Un número que sin duda se quedará corto.
El viernes 26 de julio recibirá a varios jóvenes detenidos y comerá con algunos peregrinos. Por la tarde presidirá el Via Crucis, que también tendrá lugar en Copacabana.
Sin embargo los grandes actos de la Jornada Mundial de la Juventud comenzarán el sábado por la mañana. A las 9 celebrará misa con los sacerdotes, religiosos y seminaristas en la catedral. Después se encontrará con la clase dirigente y por la tarde se encontrará con los millones de jóvenes de todos los países que le esperarán el Guaratiba, una zona acondicionada especialmente para estos eventos, donde tendrá lugar la vigilia de oración junto con el Papa.
El domingo 28 a las 10 de la mañana el Papa celebrará la Misa con al menos dos millones de jóvenes en la explanada de Guaratiba. Allí, igual que hizo Benedicto en Madrid, Francisco les convocará para la próxima cita.
Por la tarde se encontrará con el comité de coordinación del CELAM, es decir, los obispos de América Latina y por último dará las gracias a los voluntarios de la JMJ. A las siete de la tarde del domingo, tras clausurar la Jornada Mundial de la Juventud, el Papa tomará el avión y volverá a Roma donde llegará tras once horas de vuelo.
El programa es intenso. Son siete días de intensas reuniones y encuentros.Y sin duda demasiadas horas de vuelo y demasiados actos como para que Benedicto los hubiera afrontado a sus 86 años. Sin embargo es Francisco el que acudirá a esta cita con los jóvenes.
El Papa lleva una agenda apretada pero hay momentos que tendrá libre. En algunos tendrá que descansar, pero está claro que también mantendrá reuniones y encuentros que no están en el programa y que no trascenderán a la prensa. Tal y como hace ahora, tal y como ha hecho desde que fue elegido. Un "saltarse las normas" que también hará en su primer viaje oficial.
