Pistoletazo de salida para el Meeting de Comunión y Liberación

Benedicto XVI insiste con frecuencia en aprovechar el tiempo de vacaciones para descansar y profundizar en temas y aspectos culturales que durante el resto del año la agenda no deja espacio. Precisamente eso es lo que propone el Meeting de Rimini desde hace 33 años.

Las personalidades que pasan cada verano por el congreso organizado por Comunión y Liberación son siempre variadas e interesantes, como Madre Teresa de Calcuta, Tony Blair o Mario Monti, que ha estado este año.

Quizás su nombre no sea tan conocido como el de las anteriores personalidades, pero una de las primeras personas en dar su testimonio en esta edición de Meeting de Rímini fue el obispo nigeriano Ignatius Kaigana. Nigeria vive una situación dramática. Desde enero se cuentan 600 muertos provocados por la secta Boko Haram que ataca las iglesias durante las celebraciones de los domingos. Sin embargo, más allá de una primera lectura de violencia religiosa, hay otra más profunda y preocupante, que quien vive el terror en primera persona sabe bien. "La violencia que vivimos no es por motivos religiosos, sino por la corrupción y la ausencia de una autoridad política fuerte", explicó el obispo nigeriano. Ante esta situación de descontrol "los jóvenes están cada vez más desesperados y que existe la tentación de responder con violencia", monseñor Kaigana expone los problemas pero también da la solución. "La oración y la presencia de la iglesia", asegura el obispo, continúan siendo definitivas para la construcción de una sociedad en paz.